lunes, 23 de mayo de 2011









Descubrí que no puedo hacer que alguien me ame, solo convertirme en alguien a quien se pueda amar; el resto ya depende de los otros. Que por mucho que me preocupe por los demás, muchos de ellos no se preocuparan por mí, que puede requerir años para construir la confianza y únicamente segundos para destruirla que lo que verdaderamente cuenta en la vida, que no debo compararme con lo mejor de lo que hacen los demás, sino con lo mejor que puedo hacer yo, que lo más importante no es lo que me sucede sino lo que hago al respecto, que hay cosas que puedo hacer en un instante que ocasionan dolor durante toda la vida, que es importante practicar para convertirme en la persona que yo quiero ser, que siempre debo despedirme de las personas que amo con palabras amorosas; podría ser la última vez que los veo, que puedo llegar mucho más lejos de lo que pensé posible, que sino controlo mis actitudes ellas me controlan a mi, que los héroes son las personas que hacen aquello de lo que están convencidos, a pesar de las consecuencias, que aprender a perdonar no es fácil, que a veces las personas que creo que me van a patear cuando estoy caído, son aquellas que me ayudan a levantar, que la verdadera amistad y el verdadero amor continúan creciendo a pesar de las distancias, que simplemente porque alguien no me ama de la manera en que yo quisiera, no significa que no me ama a su manera, que la madurez tiene más que ver con las experiencias que he tenido aquello que he aprendido de ellas, que con el número de años cumplidos, que por bueno que sea el buen amigo, tarde o temprano me voy a sentir lastimado por él y debo saber perdonarlo por ello, que por más fuerte que sea mi duelo, el mundo no se detiene por mi dolor, que simplemente porque dos personas pelean, no significa que no se aman la una a la otra, que dos personas pueden mirar a la misma cosa y ver algo totalmente diferente, que por muchos amigos que tenga, me sentiré solitario y perdido en los momentos en los que más los necesito, que aún cuando pienso que no puedo dar más, cuando un amigo pide ayuda, logro encontrar la fortaleza para ayudarlo, que los títulos sobre la pared no nos convierten en seres humanos decentes, que las personas se mueren demasiado pronto, que es muy difícil determinar donde fijar el limite entre no herir los sentimientos de los demás y defender lo que creo, que no todo en esta vida es fácil si se quiere en realidad se tiene que sufrir, que estoy creciendo y que soy dueña de mi propio destino, que al caminar mis pasos son cada vez más largos y eso me dice que voy llegando lejos, que se puede ser feliz siempre y cuando me lo proponga.